¿Por qué es importante la imagen corporativa?
Debido al impacto económico generado por la pandemia, muchos emprendimientos se han creado durante este tiempo, aumentando la dificultad de sobresalir en un entorno cada vez más disputado. Ante este panorama, se hizo evidente la importancia de construir una imagen sólida de las marcas con el propósito de generar recordación en los clientes y posicionarse dentro del mercado.
Según Joan Costa “La imagen corporativa es la imagen que tienen todos los públicos de la organización en cuanto entidad. Es la idea global que tienen sobre sus productos, sus actividades y su conducta. En este sentido, la imagen corporativa es la proyección de una nueva mentalidad de la empresa, que busca presentarse no solamente como un sujeto puramente económico, sino más bien, como un sujeto integrante de la sociedad”.
El diseño y construcción de una marca es una herramienta de gran poder en el marketing; de hecho, este proceso fundamenta las bases de una marca exitosa. Por tal razón, la imagen de una organización constituye un elemento importante para su posicionamiento, en el que es imperativo determinar los colores institucionales, la versatilidad de uso en distintos soportes, el logotipo y el slogan.
Como parte fundamental en este proceso hay que preguntarse ¿cómo quiero ser visto?, ¿qué deseo transmitir a través de mi marca? El hecho de tener claras las respuestas a estas preguntas e identificar el público al que se quiere llegar, facilitará el discurso que guiará a la marca en busca de una historia poderosa que contar.
Teniendo en cuenta todos los factores mencionados, es necesario destacar que una imagen corporativa bien gestionada es sinónimo de interés, inversión de tiempo y una buena proyección de qué es la marca y quién quiere ser. Si no hay un buen elemento visual, es imposible garantizar el éxito de una marca. La imagen visual inspira más confianza e interés en la contratación u obtención del servicio, y en muchos casos garantiza un puesto en los ojos del público.
Para concluir, es importante armonizar todos los esfuerzos comunicativos de la marca, pues a pesar de que esta se encuentra representada visualmente por un logotipo, también la constituyen cada una de las personas que trabajan en la compañía y que dan vida a la identidad corporativa. Es así como la estrategia comunicacional y de marketing, y las vías de comunicación y representación de la marca deben ser planes muy bien ejecutados que vayan en sintonía con las iniciativas propias. Finalmente, si no hay una sinergia entre la la comunicación interna y externa de la compañía la imagen que se quiere proyectar puede flaquear. Es trabajo de todos los que conforman la organización que la imagen divulgada garantice el éxito.